El Diccionario de la lengua (Real Academia Española, 2001) remite este término al verbo transformar y ofrece tres acepciones que orientan claramente sobre su vinculación con la realización del Camino de Santiago: “Hacer cambiar de forma a alguien o a algo”, “transmutar algo en otra cosa”, “hacer mudar de porte o de costumbres a alguien”. Cualquiera de las tres definiciones -o las tres en su conjunto- se adaptan al significado que el término ‘transformación’ ha adquirido como uno de los elementos definitorios de la Ruta Jacobea: supone que alguien parte como una persona determinada y regresa como otra distinta. Es uno de los valores de prestigio y éxito de la Ruta, más allá de que esta transformación -interpretada siempre en sentido positivo- se produzca o no.
La transformación se entiende en sentido espiritual, casi psíquico, más que físico. Forma parte de la esfera íntima, interior. De producirse una transformación física siempre se valorará en función de la primera: es su plus de calidad.
Muchos peregrinos al concluir el Camino afirman haber vivido una transformación o algo parecido e indefinible, aunque duden en algún caso de la duración de sus efectos. La transformación tiene dos vertientes: la de los peregrinos con vocación religiosa y la de los demás. Los primeros la interpretan como una consecuencia de la especial conexión espiritual con Dios que se establece durante el Camino. En este sentido, su visión enlaza con la del Códice Calixtino (s. XII), que valora positivamente la transformación y la relaciona con la propia transfiguración de Jesús: “El Señor se transformó realmente en aquella gloria con la que vendrá después en su reino. La transformación añadió esplendor, no anuló el aspecto”. Los segundos, casi siempre no creyentes, interpretan la transformación como una posibilidad cierta a priori -antes de iniciar el Camino-, aunque al exterior les cueste aceptar el término. Para estos, los resultados, de producirse, afectan a una concepción global de la existencia más pausada, observadora y de aceptación positiva de la realidad más inmediata. [MR]
V. sufrimiento / superación