Desde mediados de los años cincuenta del siglo XX, la junta central de los sucesivos años jubilares compostelanos dispuso en Santiago de Compostela de una Oficina del Año Santo destinada a actuar como su órgano ejecutivo. Esta oficina, siempre en manos de la Iglesia y centrada preferentemente en su ámbito de acción, se ha venido encargando de cuestiones organizativas y promocionales relacionadas con dicha celebración religiosa. [MR]