Pueblo de 373 habitantes (870 m) en el Camino Francés a su paso por la provincia de León, Castilla y León. A 284 km de Santiago. Localidad perteneciente al municipio de Santa Marina del Rey. Su vinculación con la Ruta Jacobea queda doblemente demostrada en su topónimo, donde se hace mención al Camino y a la advocación más extendida en él, la de San Martín de Tours, a quien está dedicada la iglesia, que conserva una talla del santo montado a caballo y en actitud de cortar su capa para entregarla a quien la necesite. En el altar mayor hay esculturas de otros protectores del Camino, como son San Miguel, San Roque y San Antonio Abad. A la entrada de la parroquia se conserva una piedra con la fecha de 1643, año de construcción del templo, que sería restaurado de nuevo a principios del siglo XX añadiéndole en la parte superior una espadaña de ladrillo con vanos para las campanas.
La ermita tuvo bajo su tutela, ya en época tardía, un hospital para romeros. Archivos parroquiales fechan este dispensario en el siglo XVIII. Fundado por el licenciado Tirso Carbajo, se dedicaba a atender a peregrinos pobres a los que se les hospedaba, sanaba y daba de comer. Contaba entonces con cuatro camas para hombres, una para mujeres y otra para sacerdotes. El dispensario desapareció en torno al 1859, como consecuencia de la Desamortización de Mendizábal.
En la actualidad esta población se caracteriza por la gran cantidad de albergues que dan servicio a los peregrinos. Tiene cuatro locales, uno perteneciente a la Junta Vecinal y tres privados, lo cual facilita el descanso y la tranquilidad del romero que hace parada en esta tranquila estación jacobea. [TRI]