También Don Dinís. Es el rey Dionisio I de Portugal, apodado el Labrador (1261-1325), sexto monarca de Portugal. Era el hijo mayor del rey Alfonso III el Boloñés y de su segunda esposa, Beatriz de Castilla, por lo que era nieto de Alfonso X. Sucedió a su padre en el trono en el año 1279. Se casó con Isabel, hija de Pedro III de Aragón, llamada la Rainha Santa, que peregrinó a Compostela tras la muerte de su esposo, que también era muy devoto del Apóstol.
Fue un rey muy importante en la consolidación literaria del portugués. En su corte se cultivó la poesía trovadoresca y por ella pasaron numerosos trovadores y juglares, de hecho él mismo fue un prestigioso trovador de todos los géneros. Deja una gran cantidad de obras de las que los cancioneros recopilan un total de 138, distribuidas en todos los tipos: 73 cantigas de amor, 51 cantigas de amigo, 10 cantigas de escarnio y maldecir, tres pastorelas y una alba. Siete de sus cantigas nos han llegado con su música original descubiertas por el profesor Harvey L. Sharrer en el Arquivo Nacional da Torre do Tombo de Lisboa, en un pergamino que servía de cubierta a un libro de registros notariales del siglo XVI y al que se le dio el nombre de Pergamino Sharrer, un caso similar al de las cantigas de Martín Codax. En su época, Lisboa fue uno de los centros europeos de la cultura y el conocimiento. Fundó la Universidad de Coimbra y mandó traducir las obras más importantes del saber de su tiempo, de modo que su corte fue uno de los mayores centros literarios de la Península Ibérica y de Europa. Como sucede con otros trovadores, su obra se difundió por el Camino. Lo que sigue es un ejemplo de uno de sus poemas más conocidos. [AS]