Falifos, Hermandad de los
También Cofradía o Hermandad de Nuestra Señora de la Carballeda. Histórica institución hospitalaria que algunos estudiosos sitúan entre las primeras del Camino de Santiago en su estilo. Tiene su sede en el santuario del mismo nombre, en la localidad de Rionegro del Puente, en el Camino del Sudeste o Sanabrés, que desde la Vía de la Plata se dirige a Santiago por la provincia de Zamora. Es una de las escasas entidades españolas que se dedicaron a este fin, al contrario de lo que sucedió en países como Francia y Alemania, entre otros.
Los orígenes de esta hermandad se desconocen. Podrían situarse en los siglos XIV o XV. Se han vinculado con un milagro de la Virgen, que se apareció sobre un roble a unos peregrinos para ayudarlos a superar el río Negro en un período de crecidas. Les mandó echar sus capas sobre las aguas como si fuesen barcas y lograron cruzar a la otra orilla. A raíz de esta tradición, el santuario surgió para honrar a la Virgen María y ayudar a los peregrinos que se dirigían a Santiago por estos hermosos y aislados parajes, de gran crudeza en invierno. Fue decisiva la labor de la cofradía en el itinerario a Santiago, con la mejora y construcción de varios puentes -en clara respuesta al milagro de la Virgen- y hospitales para peregrinos. El de Rionegro sobrevivió como hospedería hasta principios del siglo XX.
El santuario de Nuestra Señora de la Carballeda, propiedad de la cofradía de los Falifos, es el principal templo de la comarca. De origen románico con reformas y ampliaciones posteriores de los siglos XV y XVIII, lo preside la Virgen, de gran veneración. Cuenta con un retablo (s. XIII) con las imágenes de Santiago y San Francisco de Asís. La Virgen de la Carballeda, patrona de la comarca, es venerada en unas famosas fiestas y ferias que se celebran cada tercer domingo del mes de septiembre.
Debe su nombre esta cofradía a la aportación denominada “del falifo”, que los hermanos hacían una sola vez en vida a la cofradía; era una especie de herencia que dejaban a la institución y consistía en un harapo o falifo (prenda de ropa) que se destinaba a la venta para recaudar fondos. Desde 1992 el falifo se puede resolver mediante una cantidad en metálico o con otros bienes. También se atribuye esta denominación a las gastadas vestimentas que los enfermos más pobres entregaban a la Virgen implorando a través de ellas su curación.
Con el renacer contemporáneo de la peregrinación por el Camino del Sudeste (o Sanabrés), la cofradía de los Falifos ha vuelto a recuperar su histórica labor de acogida, con la restauración del antiguo y casi derruido hospital, a la entrada del Camino en Rionegro. Es uno de los albergues más hermosos de esta ruta y, por sus orígenes, uno de los más evocadores y buscados por los peregrinos actuales, de las más diversas nacionalidades. [MR]