Tumbo B.Obra documental de trascendencia jacobea del Archivo de la Catedral de Santiago de Compostela (ca. 1324). Es un cartulario en el que se copia documentación real y pontificia de la Iglesia de Santiago de Compostela de los siglos IX a XIV. Junto con el Tumbo A, este volumen es uno de los principales exponentes de la organización documental de la iglesia compostelana y, con ello, del desarrollo de la institución en época medieval.
El códice tiene su origen en el arzobispado de don Berenguel de Landoira, con un sentido muy vinculado, políticamente, al hecho jacobeo. Cuando el prelado llega a Compostela, nombrado por 1318 por el papa Juan XXII, la ciudad compostelana se había revelado con la sede por el señorío. Esta cuestión finaliza en 1320 con la muerte de los cabecillas, pero Berenguel toma conciencia de la necesidad de reforzar las bases del asentamiento político de la institución, tanto desde un punto de vista teórico como práctico. En el ámbito más práctico, se refuerzan edificios como la propia catedral o la cercana fortaleza arzobispal de A Rocha Forte, con importantes renovaciones arquitectónicas; y desde el más teórico se concibe un proyecto archivístico de recopilación, selección y copia de documentación.
Este proyecto posee un sentido similar al del Tumbo A, y de hecho se copian muchas de las frases del proemio: la renovación de soporte para la documentación de la iglesia de Santiago, de manera que continuase siendo garante de sus derechos. Para llevarlo a cabo se establece un equipo de trabajo dirigido por el tesorero del Cabildo, Aymeric de Anteiac. El volumen comenzará a elaborarse en el año 1324. De esta manera se realizan varios cartularios, cada uno de ellos con temática y documentación diferentes, como el Tumbo C, con documentación privada. El B contiene 371 documentos, distribuidos en 291 folios. Se inicia con una muy ilustrativa miniatura: un Santiago ecuestre atacando a varios soldados y junto a la representación de una fortaleza. No se trata de musulmanes, como se creyó en un principio, sino de cristianos, de compostelanos, ilustrando un pasaje de los Gesta Berengarii de Landoria en que Santiago ayuda al prelado a vencer la revuelta; la representación del castillo es, sin duda, la de A Rocha Forte.
La documentación copiada en el cartulario posee una enorme importancia. Se trata de concesiones regias y papales, algunas de las cuales están ya incluidas en el Tumbo A, ahora renovadas, y otras que son inéditas; pero la característica más destacada es la presencia de dos notarios que, tras la copia de cada texto, dan fe de la correlación y correspondencia de este con el original, lo cual confiere al cartulario un valor añadido en cuanto a la fiabilidad de fuentes para la historia jacobea y de la iglesia compostelana y peninsular de los siglos IX-XIV. [XMS]