Población de 610 habitantes (57 m) en el Camino del Norte o de la Costa en la provincia y comunidad autónoma de Cantabria. A 485 km de Santiago.
Integrado en el municipio de Alfoz de Lloredo, destacan a lo largo del Camino la abadía trapense de Santa María de Viaceli y la iglesia de San Pedro Ad Vincula, ambas construidas hacia finales del siglo XIX y principios del XX. La abadía cisterciense de Santa María de Viaceli fue fundada en 1908, bajo institución canónica del papa San Pío X, por una comunidad de monjes procedentes de la abadía de Santa María del Desierto, en Francia. La donación de los hermanos Antonio y Manuel Bernaldo de Quirós posibilitó la creación de esta construcción de estilo gótico. El por aquel entonces monasterio, es erigido en abadía el 16 de octubre de 1926, y es nombrado como abad Manuel Fleché. Este centro religioso es también conocido por la persecución y asesinato de algunos de los miembros de su comunidad, hechos acontecidos durante la Segunda República y la Guerra Civil. En los años sesenta del siglo XX una comunidad de estos religiosos rehabilitó el monasterio coruñés de Santa María de Sobrado.
En cuanto a la iglesia parroquial de San Pedro Ad Vincula, se trata de un templo de estilo neogótico con reminiscencias del románico normando, edificado entre 1891 y 1910. Llama la atención el color almagre del exterior del edificio. Los Villegas aportaron parte de su excelso patrimonio para la construcción de la iglesia, así como para la fundación de dos colegios en Cóbreces. Como tantas otras familias de Cantabria, entre ellas la de los hermanos Quirós, eran conocidos como jándalos, al haberse forjado su fortuna comerciando con el sur de la península. La denominación pretendía diferenciarlos de los indianos, emigrantes retornados y cuyas riquezas se habían obtenido en América. Este mecenazgo contribuyó a que la localidad fuera conocida como la Alcalá de Henares del Cantábrico.
Contó con el hospital de peregrinos del Buen Suceso en la Edad Media, sucedido en la actualidad por la acogida que ofrecen los monjes de la abadía cisterciense durante todo el año. Otro signo del paso del camino jacobeo por esta pequeña localidad es la conocida como fuente de los Peregrinos, en la iglesia de San Pedro. Precisamente este templo es el punto de partida hacia el próximo paraje, Ruiloba, del que cabe mencionar la existencia antaño de un hospital de peregrinos. Tras atravesar las aldeas de Pando y Concha, en el municipio de Ruiloba, se llega hasta Comillas. [SOB]
V. Sobrado dos Monxes