El Camino de Santiago es con certeza uno de los testimonios más importantes de las relaciones entre Bohemia, Moravia y España a lo largo de la historia. Su inicio se sitúa en el siglo XII. Del siglo XIII data una concha de vieira localizada en la ciudad de Most, al noroeste de Bohemia, pero sobre todo destaca la fundación de numerosas iglesias dedicadas a San Jacobo (Santiago), que tienen una importancia decisiva, ya que el peregrino se podía orientar preguntando por el Camino de una iglesia a otra. Algunas no estaban directamente en él, pero son el testimonio de la devoción hacia este santo. Dentro de las iglesias, capillas o catedrales se pueden apreciar muchas huellas de interés por San Jacobo en distintas formas iconográficas que representan el santo o sus atributos.
Si en nuestro continente San Jacobo tiene consagradas unas 20.000 iglesias, según algunhas fuentes, dos décimas partes de ellas se sitúan en el suelo de la República Checa.
Asimismo, podemos constatar que en el siglo XIII Praga, junto a otras ciudades checas y moravas, se une al Camino, cuyo interés y accesibilidad para los habitantes ha variado a lo largo de la historia, según las circunstancias políticas de cada momento. Es necesario subrayar que el libro de viajes checo más antiguo narra la odisea/periplo/travesía de una comitiva de caballeros checos enviados por el rey Jorge de Poděbrady por las cortes europeas entre los años 1465-1467, para promover una alianza de paz. La narración medieval de uno de los participantes, Václav Šašek z Bířkova, fue popularizada por Alois Jirásek (1851-1930) en su libro Z Čech až na konec světa (1890) [De Bohemia hasta el fin del mundo], traducido ya al gallego y al castellano.
En los años cincuenta del siglo XX casi un tercio de los sacerdotes checos estaban encarcelados como enemigos del régimen comunista y las órdenes religiosas estaban prohibidas. Todo va a cambiar con la Revolución del 17 de noviembre de 1989, cuando vuelve la democracia y la libertad para abrir el país rumbo al oeste. Los años posteriores propician un auge y un renacer del interés cultural por el Camino. Numerosos peregrinos checos visitan Santiago de Compostela y describen sus experiencias. Podemos nombrar, por ejemplo, el libro de Zdeněk Susa titulado Ultreia, publicado en dos volúmenes, el primero en 1998 -reeditado en 2006- y el segundo en 2005, o la Cesta do Compostely [Viaje a Compostela], escrito por dos amigos licenciados por la Academia Superior de las Artes (AVU), Ivan Kolman y Jiří Šťourač, que vio la luz en el año 1999.
Unos años más tarde, en 2003, cuando Checoslovaquia deja de existir para dar paso a la creación de dos repúblicas independientes, la República Checa y la República Eslovaca, y un año antes de entrar la República Checa en la Unión Europea, aparece el primer tomo de una descripción del Camino desde Sevilla hacia el norte por la llamada Vía de la Plata titulado Španělskem od jihu k severu. Quo vadis, poutníku? [A través de España desde el sur hacia el norte], firmado por Bohumil Štěpán Müller. Dos años después nacen otros testimonios, esta vez escritos por mujeres; uno fue redactado por la conocida reportera de radio Pavla Jazairiová, Cestou hvězdy [Por el camino de la estrella] y otro, también por una mujer que emprende el Camino, Mirka Čížková. Su libro se titula Z Lurd do Santiaga [Desde Lourdes hasta Santiago]. František Šesták edita en el mismo año las experiencias de su viaje en bicicleta en un libro titulado Z Čech až na konec světa [De Bohemia hasta el fin del mundo]. Un año más tarde sale a la venta Musím jít dál-4404286 kroků P. Františka Lízny za svatým Jakubem [Tengo que seguir el camino-4404286 pasos de P. František Lízna tras San Jacobo]. Y la lista sigue.
En el año 2008 los hermanos Dominik Maxmilián y Damián Ramík publican Cesta která nekončí [Camino que no termina]. El tramo desde los Pirineos hasta el océano Atlántico está reflejado en la autobiografía de un viaje titulada 900 kilometrů… O španělském putování [900 kilómetros… Sobre la peregrinación por España] de los autores Václav Hanák e Michal Pivarči. De este año, 2009, es una guía escrita por Miluše Válková y Zuzana Churáňová, Svatojakubská cesta-průvodce pro poutníky a nejen pro ně [Camino de Santiago, guía no sólo para peregrinos]. Finalmente, otras dos mujeres, Veronika y Jitka Škvárovy dan a conocer První česky psaný průvodce po svatojakubské cestě [Primera guía del Camino de Santiago escrita en checo], donde recogen sus experiencias a lo largo del Camino Francés, concretamente del tramo entre Roncesvalles y Santiago de Compostela, junto con los 90 km que van desde Santiago hasta Fisterra.
Por la República Checa transcurren varios tramos del Camino de Santiago. En la actualidad, la asociación cívica Ultreia está realizando con el Servicio Praguense de Información (PIS), el Club de Turistas Checos [Klub českých turistů] y con otras entidades su delimitación y señalización.
Las rutas turísticas están muy bien señalizadas en Chequia. Las señales se componen de varias rayas horizontales de color rojo, verde, azul o amarillo, bordeadas arriba y abajo por una raya blanca. Los desvíos están señalizados con flechas adicionales de la misma forma. En las poblaciones y cruces de caminos hay tablas que informan sobre la distancia del siguiente objetivo. El tramo del Camino desde Praga a Tillyschanz pasa por Zbraslav. Desde ahí la señal imita un trazado del Camino Europeo E 10. A menudo aparece la identificación Svatojakubská cesta [Camino de Santiago].
El itinerario del tramo sur de la Ruta Jacobea pasa por Gniezno y Görlitz y conduce hasta Praga. Zittau (Alemania), Hrádek nad Nisou, Chrastava, Kryštofovo Údolí, Český Dub, Sezemice, Mnichovo Hradiště, Bakov nad Jizerou Mladá Boleslav, Krnsko, Benátky nad Jizerou, Sojovice, Stará Boleslav, Kbely y Praga, donde enlaza con la red europea del Camino.
El tramo Praga-Železná forma parte del Camino hacia Nürnberg, Genève y Le-Puy-en-Velay, donde se une a la Vía Podiense. Está señalado como tramo internacional turístico I10 y I24.
El trazado del Camino Praga-Všeruby pasa por Karlštejn, Příbram, Rožmitál, Kasejovice, Nepomuk, Klatovy, Kdyně -paso fronterizo- y el de Všeruby/Eschlkam -aproximadamente 200 km-. El tramo continúa hacia Regensburg, Genève, Lyon y Le Puy.
El Camino Praga-Český Krumlov une la zona norte desde Alemania y Polonia con los tramos de Austria y Bavaria del sur. En Český Krumlov enlaza con el tramo desde Moravia. Desde Český Krumlov continúa un itinerario común, ya señalado, Český Krumlov-Vítkův Kámen-Koranda/St. Oswald.
Muchos peregrinos no podían realizar el camino hacia el sepulcro de San Jacobo por su elevado coste, por lo cual surgió una versión más económica: las peregrinaciones a las iglesias locales. Una mención del Apóstol sobre este hecho la encontramos en el Cancionero de Ivančice (1576):
El nombre de Jacobo -Jakub- es popular y existe en muchas variantes: Jakoubek, Jašek, Jakeš, Kuba, Kouba, Kubula, Kubík, Kubíček, Kubeš y otras. Varias se utilizan como apellidos. Según los datos del Instituto Checo de Estadísticas, en el año 2006 se convirtió en el nombre masculino más frecuente dado a los recién nacidos. Entre los años 1999 y 2006 siempre ocupaba uno de lo tres primeros puestos junto con el nombre Jan -Juan- y Tomáš -Tomás-.
Portadores del nombre checos y famosos son el escritor y periodista Jakub Arbes (1840-1914), el cura, poeta y escritor Jakub Deml (1878-1961), el compositor de música clásica Jakub Jan Ryba (1765-1815), y el pintor Jakub Schikaneder (1855-1924). [KV]
V. Jirásek, Alois / Rozmithal, Leo von / Shaschek, Wenceslaus