Localidad de 2.330 habitantes (839 m) en el Camino Francés a su paso por la provincia de Palencia, Castilla y León. A 402 km de Santiago. Localidad importante en el ámbito jacobeo desde muy pronto, como se observa en la anotación que hace Aymeric Picaud en el Codex Calixtinus: “Carrión es villa industriosa, muy buena y rica en pan, vino, carne y en toda clase de productos”. Situada sobre uno de los escasos cerros que se encuentran en Tierra de Campos, fue capital del célebre condado de los Beni-Gómez. Fue precisamente el conde Fernán Gómez quien trasladó desde Córdoba los restos del mártir paleocristiano Zoilo y los llevó al monasterio benedictino de San Juan Bautista que tomaría el nombre de San Zoilo. Posteriormente, en 1076, su esposa Teresa donó el monasterio a Cluny, que se convertería en poco tiempo en el santuario más importante de la región, junto con el de Sahagún. Un documento procedente de este monasterio de San Zoilo señalaba que el Camino Francés era la vía “de los que van y vienen de San Pedro [de Roma] a Santiago”, dejando constancia de su situación en plena ruta de pereginación.
Muy cerca de allí se edificó sobre el año 1200 el hospital de Gonzalo Ruíz, también llamado la Herrada, porque a su puerta, que coincidía con la senda jacobea, tenía siempre una herrada o cubo de agua fresca. El centro, que prestaba servicio a los peregrinos y a otros viajeros, ofrecía de mayo a octubre medio pan y de noviembre a abril un pan entero. Entre la actual iglesia de Santiago y el desaparecido edificio del ayuntamiento se encontraba el hospital de Santiago. Los templos de San Julián, San Pedro y la Vera Cruz tuvieron también centros de acogida de peregrinos.
Otros hospitales importantes, ya en las afueras, fueron los de San Lázaro, Santa María de la Fuente y San Torcuato. Este último formaba parte de la abadía de Santa María de Benevívere, y sus restos son los únicos que quedan en pie del famoso complejo monacal. Se conserva la capilla del hospital de peregrinos, dedicada a San Torcuato y en su interior un altar de piedra dedicado a la Inmaculada con imágenes de San Juan Bautista y San Mauro.
Siguiendo la tradición hospitalaria de épocas anteriores, entre 1883 y 1884 se levanta un hospital municipal reutilizándose piedras de la extinta abadía de Benevívere. Actualmente es propiedad privada, aunque mantiene su fin asistencial como residencia de ancianos.
Los citados son sólo algunos de los más de doce hospitales que llegó a tener Carrión y que dejan constancia de la importancia que en su historia tuvo el Camino y que se plasmó también en la construcción de numerosas iglesias. Aunque no se conservan todas, todavía existe una buena muestra del esplendor pasado. Uno de los templos más destacados es el de Santiago, de mediados del siglo XII, con su friso de la misma época que es obra cumbre de la escultura románica. En él se aprecia el Pantocrátor -Cristo triunfante- rodeado de los apóstoles y de los veinticuatro ancianos que, según el Apocalipsis, estarán con Jesús en el Juicio Final. Se trata de una de las más hermosas esculturas de todo el Camino de Santiago, tanto por su majestuosidad como por la armonía general del conjunto, la cual se asemeja al propio Pórtico de la Gloria compostelano. Se dice que en esta iglesia, de origen incierto y reedificada en 1849, también estuvo asentada la Orden del Temple.
Otro templo de interés en el ámbito que nos ocupa es el de Santa María del Camino o de la Victoria, que data del siglo XII y que tiene influencias francesas por su situación en la Ruta Jacobea y curiosas leyendas sobre la vinculación de su construcción con el llamado “tributo de las cien doncellas”. También en la localidad está el convento de Santa Clara, uno de los más antiguos de esta orden en España, fundado en 1255 por la reina Mencía de Portugal, sobrina de Fernando III. Las clarisas administraron los hospitales de la Piedad y la Trinidad, este último de 1429. El convento está muy relacionado con la peregrinación de San Francisco de Asís a Compostela.
A las afueras de la ciudad, tras atravesar el puente sobre el río Carrión, está el monasterio de San Zoilo, uno de los grandes albergues para peregrinos de la Edad Media y hoy en día hospedería de tres estrellas que conserva el claustro renacentista. Parte del restaurado edificio se transformó en el Centro de Estudios y Documentación del Camino de Santiago, el cual alberga en su interior una gran biblioteca reformada en el siglo XIX que ofrece suficientes herramientas y posibilidades a aquellos que quieran revivir el espíritu de los peregrinos de la Edad Media: “Un camino de fe, pero también un camino de conocimiento. Un camino de oración, pero también un camino de arte, cultura y saber”. La localidad cuenta actualmente con tres albergues, uno parroquial situado junto a la iglesia de Santa María, otro ubicado en la plaza de San Juan y atendido por la Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul y un tercero gestionado por las Madres Clarisas. [TRI]
V. Centro de Estudios y Documentación del Camino de Santiago