Pueblo de 253 habitantes (878 m) en el Camino Francés a su paso por la provincia de León, Castilla y León. A 345 km de Santiago. Esta localidad se caracteriza por disponer de dos caminos. Uno discurre por la antigua Vía Trajana que desde Coto se desvía y pasa por Calzadilla de los Hermanillos en dirección a Mansilla de las Mulas, donde se une con la otra ruta, la del Camino Real Francés, que atraviesa el núcleo urbano procedente de Sahagún, Calzada del Coto y Bercianos del Real Camino. El trazado de la población sigue la estructura típica de los pueblos jacobeos, con una larga calle como vía principal a modo de calle-camino que han recorrido miles de peregrinos, algunos tan conocidos como Domenico Laffi, que da nombre a uno de los albergues del pueblo, situado en la antigua casa parroquial y gestionado por la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de León. En la localidad hay otros dos albergues privados.
Las edificaciones situadas en el tramo urbano del Camino conservan los rastros del apogeo económico y cultural que vivió en la antigüedad y que se observa también en la hermosa talla románica de la Virgen que durante muchos años estuvo en la iglesia parroquial de San Pedro y actualmente se encuentra en el museo de la catedral de León. De El Burgo Ranero son importantes personajes históricos, como el escultor y arquitecto Pedro del Burgo (siglo XV), abad del monasterio de San Benito de Sahagún. A él se debe la restauración de importantes monumentos como el monasterio de San Pedro de Cardeña.
Tras esta población continúa la eterna planicie castellana que da lugar a uno de los tramos deshabitados más largos. Quizá por ello ha calado aquí una leyenda tan extendida como indemostrable, que habla de la muerte de un peregrino a causa de los feroces ataques de un lobo. [TRI]