Amsterdam
Capital constitucional -ya que la sede del gobierno de la nación se encuentra en la ciudad de La Haya- y principal ciudad de Holanda, con 755.000 habitantes, perteneciente a la provincia de Holanda Septentrional. A 2.049 km de Santiago. Emplazado a orillas del IJ, un brazo del lago IJsselmeer, en la edad media constituía un importante puerto al cual arribaban los peregrinos para iniciar desde allí su viaje hasta Compostela. El hecho de encontrarse la urbe asentada sobre 90 islas, surcadas por numerosos canales, condicionó en gran manera su desarrollo portuario, llegando a integrarse en la Liga Hanseática en 1369. Formó parte del imperio carolingio de España -hasta el siglo XVII-y fue ocupada también por las tropas napoleónicas.
Enmarcada en lo que se conocía como los Países Bajos del Norte, fue una de las últimas ciudades en adoptar el culto a Santiago, ya que fue en los Países Bajos del Sur -actual Bélgica- donde se inició su devoción, desplazándose desde aquí hacia el norte. Esta es la razón principal por la que no se encuentran tantas huellas en la zona capaces de atestiguar el paso de peregrinos como las hay en Bélgica.
La Reforma, conjuntamente con el ataque a las peregrinaciones devocionales y las trabas a las peregrinaciones impuestas, provocó el desinterés de los habitantes de Amsterdam y por extensión de los Países Bajos, en lo que al mundo jacobeo se refiere. Incluso mediante un decreto del 23 de junio de 1587 se prohibieron totalmente las peregrinaciones. Pero esto no significa que cesaran por completo. Incluso la vía marítima siguió siendo una importante ruta de viaje aunque a partir de entonces, eso sí, mucho menos segura. Los itinerarios por mar deben ponerse en relación con las relaciones comerciales establecidas entre los Países Bajos y los puertos hanseáticos con las ciudades del norte de España. Resulta ejemplar el nexo de unión que proporcionaba por aquel entonces la ciudad de Santiago de Compostela para el comercio entre portugueses y holandeses. Durante el armisticio hispano-holandés (1609-1621), un portugués estableció un negocio de telas en la ciudad del Apóstol con varios vendedores procedentes de los Países Bajos. Asimismo, los intermediarios procedían de diversas partes de Europa: Ámsterdam, Hamburgo, Amberes, Francia, Inglaterra, Escocia, etc. Ni siquiera la reanudación de las hostilidades entre España y los Países Bajos, ni la crisis de la industria naval de los enclaves cantábricos, consiguieron acabar con esta ruta comercial.
Entre los vestigios jacobeos de la urbe destaca el emblema descubierto durante las excavaciones realizadas para la construcción del metro de Ámsterdam (1973). Se trata de un símbolo peculiar, ya que no estaba destinado al culto dentro de un templo, sino seguramente para la protección de un barco o de una casa. Es una especie de altar casero, compuesto por una simple tabla de pino con una hendidura, en la que había dos emblemas en forma de hostia procedentes de dos lugares de peregrinación famosos: Blomberg y Wilsnack. No es de extrañar la existencia de tales insignias, ya que durante la Edad Media era frecuente la utilización de símbolos en el propio hogar para mitigar supersticiones y defenderse del mal. También hubo en Ámsterdam una cofradía de Santiago, una modesta asociación que a lo sumo conservaba una capilla o un altar. Sin embargo, este tipo de hermandades dinamizaban la vida social de las ciudades en las que se instalaban. Mediante la celebración de banquetes y procesiones consiguieron integrarse en la comunidad de las diferentes urbes.
Desde Ámsterdam el Camino se dirige hacia la Niederstrasse o Camino Bajo, llegando hasta París, punto donde enlaza con la Vía Turonense.
Los principales monumentos de Ámsterdam son la Oude Kerk -iglesia Vieja- construcción edificada en el siglo XIII y ampliada alrededor del 1300, y la Nieuwe Kerk -iglesia Nueva- del siglo XV. La iglesia Vieja fue fundada bajo la advocación de San Nicolás, patrón de los marineros. Precisamente su torre, que alcanza los 70 metros de altura, proporcionaba un punto de referencia a los barcos. Durante la Reforma los iconoclastas robaron y destruyeron las imágenes y tesoros que custodiaba, aunque tras los saqueos de este período el templo pudo ser recuperado a partir del siglo XVII. Desde 1979 está reconocida como basílica. En cuanto a la iglesia Nueva, emplazada junto al Palacio Real, está consagrada a la Virgen y a Santa Catalina. Fue reconstruida por Jacob van Campen en estilo gótico renacentista tras el gran incendio de 1645. En su interior tienen lugar las ceremonias de coronación de los reyes y reinas de Holanda, así como las bodas reales. La línea de defensa de la ciudad fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1996. [SOB]
V. Holanda