También Sancho el Mayor. Rey de Pamplona-Navarra (992-1035). Reinado: 1000-1035. Fue conde de Aragón y Castilla, donde ejerció una gran influencia. Conquistó nuevos territorios de Aragón y La Rioja y fue el primer monarca hispano que intentó la unificación de los reinos cristianos peninsulares. En este sentido, la Historia Silense (s. XII) resalta su decisiva labor a favor de la consolidación del Camino Francés por territorio aragonés: “Desde las cumbres de los Pirineos hasta la ciudad de Nájera hizo correr sin obstáculos el Camino de Santiago, cuando antes, por miedo a los bárbaros, los peregrinos se desviaban por la apartadiza Álava.”
Sentaría este Sancho el Mayor las bases para el trazado definitivo del Camino por tierras navarras y aragonesas aprovechando viejas calzadas de origen romano. Favoreció esta labor impulsando hacia occidente su utilización para uso militar. Al mismo tiempo, comienza a convertirse en la gran vía transversal de comunicación de los reinos cristianos del norte de España. En esta tarea pudo contar con el apoyo de su esposa, Mayor, quien habría ordenado -es una de las hipótesis que se barajan- la construcción del puente más famoso de todas las rutas jacobeas, el de Puente la Reina (Navarra), sobre el río Arga, para facilitar principalmente el paso de los peregrinos. Hay propuestas que indican que pudo realizarse más tarde, hacia el reinado de Sancho Ramírez, en la segunda mitad del siglo XI.
Sancho el Mayor no sólo mejoró el trazado y la protección de la ruta, sino que tomó medidas para mejorar la hospitalidad con los peregrinos y anuló determinadas exigencias fiscales a las que se veían sometidos. Fundó el monasterio de San Juan de la Peña (Jaca), vinculado al Camino Aragonés, y en relación con este hecho, favoreció la entrada en España de la orden de Cluny, crucial en el desarrollo de la Ruta.
Fue, en definitiva, el monarca más destacado hasta mediado el siglo XI en el fomento de la Ruta Jacobea, mostrando la senda a seguir a los dos reyes que en la segunda mitad de esta centuria iban a culminar el proceso, tanto atendiendo a su poderoso valor espiritual frente al islam como a sus innegables beneficios socio-económicos. Nos referimos a su nieto Alfonso VI, en Castilla y León, y Sancho I Ramírez, en Aragón y Navarra. Estos monarcas establecerán el trazado del itinerario francés, facilitando su conversión en una gran vía europea medieval, tal y como quedará descrito hacia 1130 en la celebérrima guía del peregrino del Codex Calixtinus.
Sancho el Mayor también promovió la peregrinación al santuario de Oviedo. Fue padre de Fernando I de León, continuador de su labor jacobea. [MR]