En valenciano, Camí de Llevant. Camino de peregrinación jacobea que parte de Valencia y culmina en Zamora, donde se une a la Vía de la Plata. Discurre a través de las comunidades autónomas de Valencia, Castilla-La Mancha, Madrid, Castilla y León y Galicia. Desde Valencia a Compostela, tiene una longitud total de 1.140 km; sólo hasta Zamora tiene 860 km. Gran parte de su trazado coincide con el del Camino del Sureste. Por ser una ruta extensa, que atraviesa la península de sudeste a noroeste, presenta una fuerte diversidad: orográfica, de paisaje, cultura, gastronómica, etc.
El Camino de Levante fue redescubierto por la Asociación Amigos del Camino de Santiago de la Comunitat Valenciana en 1991 y señalizado desde 1993. El origen histórico fue documentado en el libro Presencia de peregrinos en el Hospital General de Valencia en el siglo XVI (1543-1601), editado por la misma asociación. La obra pone de manifiesto que numerosos peregrinos de la Edad Media procedentes de diversos puntos del Mediterráneo como Nápoles, Sicilia o Baleares, e incluso Roma, Jerusalén y Palestina, llegaban a la península por el puerto de Valencia. Desde allí se trasladaban a Santiago siguiendo una parte de la Vía Augusta romana. Este mismo itinerario era recorrido a la inversa por romeros y palmeros que peregrinaban a Roma y Jerusalén. Los numerosos hospitales que se crearon durante la Edad Media a lo largo de este trazado son un claro indicador de que esta ruta fue muy transitada.
El recorrido por la comunidad valenciana (111 km) presenta un perfil principalmente llano en el que sólo se elevan las cumbres de las pequeñas montañas de Alcira y de Xátiva que van bordeando el Camino. Discurre por el entorno de la Albufera y la Acequia Real del Júcar. Antaño fue constante la presencia de hospitales, ermitas e iglesias con advocación a Santiago o imágenes de este, algunas de ellas en pie en la actualidad.
Un posible punto de partida del Camino de Levante es la puerta de los Apóstoles de la catedral de Valencia (s. XIV). En adelante el Camino divaga por las calles de la ciudad hasta toparse con un miliario que marca el kilómetro 0 de la Vía Augusta y del Camino de Levante. Varias de las localidades que se encuentran en el tramo que sigue ofrecían cobijo a los peregrinos. En el Archivo Municipal de Catarroja existen asientos que se refieren a llits als peregrins per una nit. Silla contó con un antiguo hospital de peregrinos de la Orden de San Juan de Jerusalén mientras que Alzira en el siglo XIII disponía de tres hospitales, que se fusionaron posteriormente para formar el hospital de Santa Lucía. Los marqueses de Santiago tuvieron posesiones en esta última entidad, Alzira. De hecho, el actual edificio del ayuntamiento fue construido por ellos a finales del siglo XVI y en él se puede ver una tabla gótica que representa a seis apóstoles, entre ellos un magnífico Santiago Apóstol.
El trazado prosigue por Carcaixent, que también tuvo un hospital de transeúntes, Pobla Llarga, donde se cree que existió un centro de peregrinos bajo la advocación de San Martín, y Xátiva. Esta población es una joya arquitectónica de pasado pujante en la que se yerguen antiguos palacios, un castillo declarado Monumento Nacional, numerosas construcciones cristianas y un hospital (s. XV), que estuvo a cargo de los frailes de la Penitencia de Jesucristo, en el que atendían a peregrinos y que también es reconocido como Monumento Nacional.
Después de varios kilómetros de recorrido, y superadas algunas poblaciones relevantes como Mogente -Moixent en valenciano- se entra en Castilla-La Mancha por la provincia de Albacete tras cruzar las lomas del Mellado. En sus 407 km de recorrido por tierras manchegas, el camino, que desde aquí sigue el mismo itinerario que el Camino del Sureste, desde Alicante, pasa por las provincias de Albacete, Cuenca y Toledo, afrontando los primeros desniveles del itinerario. Los castillos, iglesias y restos romanos y árabes son una constante junto con las plantaciones de girasoles, cereales, olivos y viñas.
Almansa -de estimable belleza arquitectónica entre la que se cuenta una iglesia de Santiago- Higueruela y Chinchilla, son algunas de las entidades relevantes que preceden a la ciudad de Albacete. Al igual que Valencia, esta tuvo una fuerte presencia hospitalaria: el albergue fundado por la Congregación de la Hospitalidad del Divino Pastor y el convento de los Padres Antonianos o de San Antonio Abad, que sirvió de albergue hasta el siglo XIX, además de la posada del Rosario del siglo XVI, situada en la calle del Tinte.
Tras salvar el canal Tajo-Segura, el Camino se dirige a Toledo. En zonas de este trayecto estuvo instaurada la Orden de Santiago, dominando territorios en los que hoy se encuentran, entre otras, las localidades de Mota del Pueblo, El Toboso, Quintanar de Orden, La Puebla de Almoradiel, Don Fadrique y Mora. Reflejo de esta presencia son sus iglesias con advocación a Santiago y hospitales de peregrinos. También se asentó más allá de la ciudad toledana, como es el caso de Torrijos; un pueblo cuyo vínculo con el Camino está directamente relacionado con las obras de Gutierre de Cárdenas, comendador de la Orden de Santiago, y de su esposa, Teresa Enríquez, fundadores del hospital de la Santísima Trinidad, llamado del Cristo de la Sangre. La mujer, además, ordenó fundar el convento de los Franciscanos y su iglesia Colegiata del Santísimo Sacramento (s. XVI). Se dice de ella que tenía por costumbre dar comida a los cientos de peregrinos que se reunían por ese motivo en la plaza en la que actualmente se levanta la iglesia. Esta práctica le valió el apodo de La loca del Sacramento.
En la comunidad de Madrid, el Camino abarca sólo 10 km y toca la localidad de San Martín de Valdeiglesias, sede de un antiguo hospital de peregrinos y de la iglesia inacabada de San Martín (s. XVI), obra de Juan de Herrera. Tras esta breve andadura, se llega a Castilla y León (381 km). Buena parte del recorrido por esta comunidad está caracterizado por el paso del río Duero, por los paisajes verdes y el amarillo de girasoles y cereales, y ornamentado por diversas obras de arte mudéjar. Ávila es la primera localidad relevante que se encuentra. Considerada la ciudad medieval amurallada mejor conservada de Europa, alberga numerosos monumentos que acercan al presente su pujanza de antaño. Se suceden después diversas localidades entre las que se cuentan Cardeñosa, Gotarrendura, Tiñosillos y Arévalo, hasta llegar a Medina del Campo, una ciudad que desempeñó un papel relevante en la historia, lo que le valió para aglutinar bellos monumentos, algunos de valor jacobeo como es el caso de la iglesia de Santiago, comenzada en el siglo XVI con estilo jesuítico, y la de San Martín (s. XVI), actual Auditorio Municipal.
A la salida de Medina del Campo se puede seguir en dirección al norte por el Camino del Sureste, que conecta con Benavente para enlazar con el Camino Sanabrés o del Sudeste. También es posible ir más hacia el norte y llegar a Astorga, que conecta con el Camino Francés.
Siguiendo el itinerario que lleva a Zamora, se cruza la vega del Duero, uno de los paisajes más bellos de todo el Camino y, más adelante, salva este río para entrar en Toro. Esta localidad se distinguió desde muy antiguo por el número y calidad de sus hospitales y fundaciones benéficas, de los que llegó a tener hasta doce. Entre ellos cabe destacar el de Rocamador, Los Palmeros, el de Roncesvalles o el hospital de la Cruz, este último aún en pie. En lo que se refiere a monumentos religiosos, se puede visitar la iglesia mudéjar de San Salvador (s. XIII). De aquí hasta Zamora el Camino discurre paralelo al Duero. Una vez en esta ciudad, el caminante puede seguir hacia Granja de Moruela y enlazar con el Camino Sanabrés o Sudeste o bien tomar la variante de ese trazado que pasa por Portugal. Una tercera opción sería seguir en dirección norte hasta Astorga y allí confluir en el Camino Francés.
A través del Camino de Levante es posible seguir la huella de significativos ejemplos de cultura jacobea, y caminera, como hemos visto. Uno de los más evidentes en este recorrido son los hospitales para peregrinos. Sólo Valencia durante el siglo XIII llegó a tener trece centros asistenciales. Además de los mencionados en el apartado anterior, se contaban los de las siguientes localidades: Canals, en activo hasta el año 1860; Almansa; Chinchilla, fundado en el siglo XIV y actualmente en ruinas; Mota del Pueblo, perteneció a la Orden de Santiago y estuvo en activo hasta el siglo X; Quintanar de la Orden, dependiente de la Orden de Santiago; Rielves; Maqueda y Escalona. A nivel arquitectónico, destaca el hospital Mayor de Pobres de Xátiva (ss. XV y XVI), declarado Monumento Nacional y en el que se funden diferentes estilos y épocas.
Numerosas iglesias con advocación a Santiago también jalonan el Camino. Algunas de ellas son las de los pueblos de Ayacor (s. XVIII), Minaya (s. XVI), San Clemente (s. XV), Santa María de Llanos, que luce en su ábside una cruz de Santiago y una vieira y tenía una puerta del Perdón que fue tapiada y Quintanar de la Orden (s. XVI).
Esta ruta está totalmente señalizada con flechas amarillas, postes y tablillas indicativas desde el año 2007; la Xunta de Galicia, la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de la Comunitat Valenciana y otras instituciones valencianas colaboraron en este proyecto. En el año 2009 consiguió su homologación como sendero de gran recorrido GR-239 lo que, en opinión de la citada asociación, servirá para darle mayor visibilidad e incrementar la afluencia de caminantes.
Otras rutas de reciente creación como la del Quijote, el Camino de San Vicente Mártir o la Ruta del Cid se superponen o se cruzan con este Camino de peregrinación.
Uno de los mayores problemas con los que se encuentra el caminante es la ausencia de alojamientos destinados a peregrinos, por lo que en muchas ocasiones es necesario recurrir a hostales. Algunas de las localidades que disponen de albergue o lugares de acogida para el caminante son Font de la Figuera, Almansa, Higueruela, La Roda, Escalona y Gotarrendura. [XIV]
V. Ávila / Sudeste, Camino del / Toledo / Valencia /