(?-1249) Citado también como el Tudense. Cronista castellano. Canónigo de San Isidoro de León (1221-1239) y obispo de Tui: 1239-1249. Peregrinó a Roma, Constantinopla y Jerusalén entre los años 1220 y 1230. Autor de la composición De altera vita fideique controversiis adversus Abligensum errores libri III (1234-1235), inspirada en San Gregorio y San Isidoro.
Autor también de Chronicon mundi (ca. 1238), que realizó por encargo de la reina Berenguela y que fue traducido al castellano, actualmente custodiado en el monasterio leonés de San Isidoro. La obra abarca desde los orígenes del mundo hasta la conquista de Córdoba en 1236 por el rey Fernando III. Comienza enfocando la historia con una perspectiva universal, inspirándose en San Isidoro, pero se convierte pronto en una crónica española. Sus principales fuentes son San Isidoro, el Biclarense, Hidacio y Orosio, Alfonso III, el Silense y Sampiro. Resulta de interés para la investigación sobre la épica castellana, ya que se reproducen las recopilaciones cronísticas del reino asturiano-leonés. Puede considerarse de las primeras obras historiográficas que utilizan extensamente las gestas como fuentes históricas.
Lucas de Tui es uno de los autores que afirman la existencia de un camino jacobeo, anterior al trazado por Sancho el Mayor, que entra en la península por Roncesvalles. Debido a razones estratégicas, expone que se desvía el antiguo Camino de Santiago per devia Alave, de lo que se puede deducir que el sendero de la costa permaneció cerrado. Las palabras textuales que aporta el Chronicon mundi son “quod barbarica infestatione clausum erat et per devia Alave peregrini declinabant“, aunque la traducción del texto implica dificultades y ofrece diversas interpretaciones. Esta referencia de Lucas de Tui procede de la Historia Silense del Año 1110: “Ab ipsis namque Pirineis iugis adusque castrum Nazara quidquid terre infra continetur a potestate paganorum eripiens, iter Sancti Iacobi quod barbarico timore per devia Alave peregrini declinabant absque retractationis obstaculo currere fecit.”
Otro aspecto que figura en el Chronicon mundi es la voluntad de Castilla por ser exponente de la unificación española. Para Lucas de Tui constituye un imperativo divino, un mandato del apóstol Santiago que reveló al rey de Asturias en una visión, contándole que Jesús repartió las provincias entre sus apóstoles, entregándole España en su totalidad a su protección y conducción. Por eso describe a Santiago en las batallas, vestido de blanco, armado de una espada, montado en un esplendoroso caballo blanco, portando el estandarte de la guerra entre los españoles. Se trata de la réplica exacta, cristiana, de la representación musulmana de Mahoma; es el ejemplo naciente de la intención real para crear una conciencia de unidad entre los cristianos hispanos. En este sentido, la obra de Lucas de Tui ofrece la tradición de la batalla de Clavijo y el Voto a Santiago que de ella se derivaría. [IM]